Los Toritos perdió 5-2 ante Catenaccio por el Torneo Apertura 2018. Tras el receso por varias fechas libres (feriados y partidos del Mundial) se retornó a la actividad con una dura derrota ante el equipo que la temporada pasada jugó en la categoría “B”.

En el primer tiempo Los Toritos salió con su plan de juego más usual: presión en mediocampo para recuperar la pelota y posesión ofensiva. Hubo pocos minutos donde se pudo llevar a cabo la planificación. El primer gol lo convirtió De Benedetto con un buen remate de media distancia tras asistencia de Funes. Pero Catenacció aprovechó las situaciones que tuvo y pudo dominar el marcador 2-1 para irse al entretiempo liderando.

La defensa fue el punto más vulnerable del equipo en general, y particularmente en el segundo tiempo. Los bajos niveles individuales generaron desconfianza y los protagonistas nunca pudieron recuperarse. Cada avance de Catenaccio se tradujo en gol y Los Toritos sólo pudo descontar cuando perdía 3-2, pero por cada gol propio había dos de los rivales. No hubo fútbol, ni solidez, ni compañerismo, ni actitud.

La imagen que dejó el equipo fue preocupante de cara al futuro. Son cosas que no pueden volver a repetirse, porque la dignidad en la derrota no es un valor despreciable, y en este caso pareciera que daba lo mismo. La derrota en el marcador fue 5-2, pero lo más grave sucede de la línea de cal hacia afuera, donde se expresan el malestar y las inseguridades de cada uno respecto al planteo de los partidos y la idea de juego.

Kevin Melgar: Se lo notó fuera de ritmo futbolístico y cometió varios errores. Con rodaje irá revirtiendo su actuación.

Agustín Guillén: Marcó bien al 9 rival pero perdió una pelota que se transformó en gol, y sufrió mucho el pelotazo a su espalda.

Francisco Guglielmotti: Bien en el mano a mano contra la figura del rival, pero debe trabajar más el aspecto actitudinal.

Pablo Ricci: Poca marca, hizo una de más donde no debía y el rival encontró el gol. Su principal falla: no soltar la pelota.

Esteban Bernasconi: Corrió mucho y se sacrificó para marcar. Se lo vio más estático que otras veces. Se retiró desgarrado.

Julián De Benedetto: La pidió siempre e intentó generar fútbol en un equipo sin ideas. No destacó pero su partido fue correcto.

Martín Maiorana: Jugó apenas cinco minutos y se retiró con una fuerte contractura. Sus pocas intervenciones fueron buenas.

Guillermo Funes: Atacó bien el rebote en el penal que le atajaron a García y convirtió el gol. El resto del partido fue regular, no tuvo grandes intervenciones. Debe aparecer más en ataque.

Dany García: Tuvo un buen despliegue en el frente de ataque y por momentos fue el único que pegó un grito para motivar. Debe destacarse su personalidad para volver a patear un penal, aunque la ejecución no fue óptima.

Sebastián López: El tiempo que le tocó jugar no pudo tener un buen desempeño, y tampoco mejoró a partir de los consejos y/o críticas.

Rodrigo Montechiesi: Nunca se encontró dentro del campo de juego, le costó mucho el partido.